Gasóleo calefacción

El gasóleo calefacción es un combustible derivado del petróleo que se utiliza en sistemas de calefacción central de hogares y empresas, así como en hornos industriales.

El gasóleo de calefacción no tiene azufres y metales y lleva aditivos específicos para proteger la caldera de la calefacción, prevenir su envejecimiento y neutralizar el olor.

Además, su enorme poder de producción de calor lo convierte en un combustible cómodo y limpio para cualquier espacio interior.

Gasóleo calefacción

Gasóleo a domicilio

El gasóleo a domicilio sigue siendo uno de los combustibles más consumidos por los usuarios como fuente de calor en el uso de calderas industriales y calefacciones de hogar. Desde hace décadas, muchos hogares disponen de este tipo de instalaciones para asegurar el bienestar y un buen ambiente en las épocas más frías del año.

Gasóleo agrícola

El gasóleo agrícola es el producto específico para vehículos y maquinaria dedicados a la agricultura, ganadería, explotación forestal y algunos tipos de maquinaria industrial. Sus características son muy similares al diesel utilizado en la automoción, pero le diferencian dos atributos que hacen de este gasóleo un gasóleo especializado.

Gasóleo B para empresas

Este tipo de combustible está pensado específicamente para el uso profesional, y como principal beneficio se trata de un gasóleo bonificado. Gracias a ello, en determinadas ocasiones da derecho a la devolución parcial de las cuotas satisfechas en este impuesto especial sobre hidrocarburos.

Gasóleo profesional

El conocido por todos los profesionales de la carretera como «Gasóleo Profesional» no es un tipo de combustible distinto al resto de carburantes, como pueden ser los gasóleos agrícola o de calefacción, sino que se trata de un mecanismo de devolución parcial.